Nivel de dificultad: 5/10 (Más delicada que una flor de invernadero, pero con paciencia se luce)
La Érica, también conocida como brezo, es una planta que deslumbra con sus diminutas flores en tonos rosas, lilas o blancos, que cubren sus ramas como un tapiz colorido. Es perfecta para macetas, jardines rocosos o bordes florales, aportando un aire silvestre y encantador. Eso sí, es un poquito quisquillosa con el suelo y la humedad, así que hay que tratarla con amor y paciencia.
• Riego: Moderado a alto. Le gusta la humedad, pero no el encharcamiento. Regá con frecuencia, sobre todo en épocas de calor.
• Luz: Pleno sol o semisombra. Si querés que florezca con todo su esplendor, asegurale varias horas de luz diaria.
• Humedad: Media a alta. Prefiere ambientes frescos y algo húmedos, pero bien ventilados.
• Dificultad: 5/10 (No es la más fácil, pero si le das el ambiente adecuado, te va a regalar una floración espectacular)
La Érica es ideal para quienes buscan una planta que aporte color y textura a su jardín o balcón. Con sus flores abundantes y su follaje compacto, se convierte en un verdadero espectáculo natural cuando está en su mejor momento.
