Salvia nemorosa (Salvia nemorosa)

 

Nivel de dificultad: 3/10 (Fácil, pero un poquito sofisticada en sus gustos)

 

La Salvia nemorosa es la diva de las plantas perennes. Con sus espigas de flores moradas que se alzan como una corona de elegancia, es la estrella de cualquier jardín que busque un toque sofisticado y colorido. Esta salvia no solo es un deleite para la vista, sino que también atrae a mariposas y abejas, convirtiéndola en un imán de vida en tu espacio.

 

* Riego: Moderado. La Salvia nemorosa prefiere un riego regular, pero no le gustan los encharcamientos. Dejá que el sustrato se seque un poco entre riegos, pero no la dejes completamente deshidratada. Si le das agua de más, puede que se sienta un poco incómoda y sufra de pudrición de raíces.

* Luz: Sol directo. ¡Dale todo el sol que pueda! La Salvia nemorosa es fanática de la luz solar y necesita al menos 6 horas de sol directo al día para florecer generosamente. Si la pones en sombra, no vas a ver esas flores moradas tan intensas, así que asegurate de darle su dosis de sol.

* Humedad: Baja a moderada. Es resistente a la sequía y se adapta bien a climas secos. No le gusta la humedad excesiva, por lo que un buen drenaje es clave para evitar problemas. Si vivís en una zona muy húmeda, asegurate de que esté en un lugar bien ventilado.

* Dificultad: 3/10 (Fácil de cuidar, pero un toque exigente con el sol y el drenaje)

 

La Salvia nemorosa es perfecta si querés una planta que no solo sea fácil de cuidar, sino que también te brinde una explosión de color morado en tu jardín o balcón. Con un poco de sol y el riego adecuado, vas a tener una planta resistente, hermosa y llena de vida, que hará que todos los que la vean se queden con la boca abierta. ¡No es diva, solo sabe lo que quiere!