(Cressula Seaforte)

 

Nivel de dificultad: 3/10 (Cuidada con amor, es una belleza fácil de mantener)

 

La Seaforte es una de esas suculentas que no solo te cautiva con su aspecto, sino que también es fácil de mantener, lo que la convierte en la amiga ideal para cualquiera que no sea experto en jardinería. Sus hojas carnosas y gruesas, de tonos verde-azulados, se apilan de forma atractiva, dando un toque de frescura y elegancia. Es como tener una mini obra de arte natural en tu casa.

 

* Riego: Moderado. Como toda suculenta, la Seaforte no es fan del exceso de agua. El truco es regarla solo cuando la tierra esté completamente seca. En invierno, reducí los riegos, ya que entra en una fase de descanso. Si la ahogás, sus raíces se pudren, ¡y no queremos eso!

* Luz: Mucha luz indirecta. A la Seaforte le encanta la luz, pero el sol directo puede dañarla, especialmente en los días más calurosos. Un lugar luminoso y cálido, sin exposición directa, es su zona de confort. Si no recibe suficiente luz, sus hojas pueden volverse más pálidas, así que asegurate de darle el ambiente adecuado.

* Humedad: Baja. Esta suculenta es resistente a ambientes secos, por lo que no tenés que preocuparte mucho por la humedad. No le gusta que la rocies con agua, por lo que no es necesario hacerle mucho mimos extra. Con el riego adecuado, se sentirá como en su hogar.

* Dificultad: 3/10 (Básicamente requiere que no te olvides de ella y de no regalarle un baño cada dos minutos)

 

Si estás buscando una planta que sea fácil de cuidar, pero que dé un toque de frescura y un poco de onda a tu espacio, la Seaforte es la opción perfecta. Con su aspecto elegante y sus necesidades sencillas, es una suculenta ideal para cualquiera que quiera un rincón verde sin complicarse demasiado. Y lo mejor, ¡te perdonará si te olvidas de regarla por un par de días!